En la Argentina, el canto popular de raíz folklórica tiene una larga y excelente producción de grandes voces femeninas. Sandra Aguirre es la prueba presente de esta tradición. Sandra impuso su talento y la musicalidad de su voz a la atención del público y la crítica en 1998, y por partida doble: ese año ganó el Primer Premio en el Pre-festival de Cosquín y, ya en el marco oficial del festival, que es la más importante cita anual del canto popular argentino, el Primer Premio Revelación. Estos premios simultáneos constituyen la mejor prueba de su canto, ya que sólo raramente coinciden en Cosquín público y crítica. Otra característica del arte de Sandra Aguirre –parte de esa misma tradición de grandes vocalistas femeninas del “folk” argentino- es la personalidad y belleza de su timbre, su gran extensión vocal, su riqueza compositiva y una afinación perfecta, cualidades poco comunes en un panorama en el que la pura expresividad a menudo condiciona los valores musicales. Confirmación de su trayectoria fue, en 2000, su triunfo en los Premios Octubre, lo que le permitió acceder a la grabación de su primer disco (“Sí”), con el prestigioso sello Melopea.”El hombre de Barro”, su segunda producción grabada también en Melopea, se presenta actualmente en diversos escenarios de nuestro país. Gracias a sus dotes musicales, el talento de Sandra atrae a públicos eclécticos, más allá del ámbito habitual de los amantes del folklore.
No hay comentarios:
Publicar un comentario